Satán, a veces, viene disfrazado como un hombre de paz, canta Dylan en uno de los discos de su trilogía evangélica. Es el político que te pregunta por tu familia, te da recuerdos para tus hijos y te desea suerte para llegar a fin de mes. El mismo que votó la reforma laboral. Camus escribió que cuando recubrimos las desgracias con retórica es porque o éstas acaban de comenzar o es que ya han terminado. En el primer caso lo hacemos por costumbre; en el segundo, por no perder el hábito de seguir consolándonos con nuestras plegarias.
La Noria del sábado en El Mundo.
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