La gente de orden no va a manifestaciones. Salvo que crea que está en peligro su patrimonio o se cuestiona su status. Ambas cosas, junto a la necesidad de Génova de que la oposición a la amnistía tome cuerpo social en otras zonas de España distintas a Madrid, explican que la derecha meridional haya organizado en Málaga, con Feijóo y Moreno Bonilla, una protesta en contra de los demonios de la investidura. El lugar elegido (la calle Larios de la capital de la Costa del Sol, dedicada a una de las grandes estirpes industriales del siglo XIX) es garantía de éxito. Málaga es la Atlanta del PP andaluz, que dirige su ayuntamiento hace 28 años y domina la diputación desde 2011. Es el feudo de Bendodo. La ciudad donde el presidente de la Junta empezó a hacer política. El origen del clan que hace un lustro gobierna Andalucía. Para la derecha del Sur no existe diferencia entre la amnistía, el referéndum y la financiación autonómica. Las tres cosas –lo escenifican cada semana en el Parlamento– son lo mismo: una amenaza para el autogobierno.
Los Cuadernos del Sur en La Vanguardia.