Me escribe un lector, especie en peligro de extinción, para preguntarme cómo es posible que en estas Crónicas Indígenas, por cuyo éxito de crítica y público, notable sobre todo entre las huestes susánidas, sólo puedo estarle agradecido a Su Peronísima (el mérito también es suyo), se defina a Andalucía como una república gobernada por una reina (de las marismas).
Las Crónicas Indígenas del viernes en El Mundo.
Deja una respuesta