Las bebidas azucaradas son el nuevo diablo. Todos los expertos en salud hablan mal de ellas. Dicen que aumentan el peso y causan enfermedades cardiacas, diabetes y gota, que era la dolencia más frecuente (e ilustre) entre los antiguos emperadores, los únicos que en su tiempo comían carne. No sabemos si el Reverendísimo Bonilla, alias JuanmaPorEso, es aficionado a alguna -tiene pinta de gustarle la Fanta-, pero el primer aniversario de su llegada a Il Quirinale, un año después de la gran carambola, lo está celebrando con exceso de azúcar. Según su perspectiva (subjetiva), la Marisma se ha transformado desde que gobierna (Él) en Silicon Valley. Gozamos de todos los dones del paraíso. Tenemos paro, bolsas de pobreza (sin fondo), una administración cara y elefantiásica, un sistema de salud que se nos va por el sumidero y una gestión deplorable de la ley de dependencia, pero, queridos indígenas, no podemos quejarnos absolutamente de nada porque, a cambio de todas estas plagas, tan meridionales, contamos con estabilidad, esa bendición de los cielos.
Las Crónicas Indígenas en El Mundo.
Deja una respuesta