La biología define a los siameses como aquellos hermanos gemelos que comparten un único cuerpo. Dos individuos atrapados en la misma piel. Un fenómeno relativamente escaso, según las estadísticas médicas, y con un pronóstico de supervivencia remoto. Los siameses no suelen vivir demasiado tiempo. No sucede lo mismo en la política española, donde las estructuras administrativas que dependen del presupuesto se han multiplicado gracias a la indefinición genética del Estado autonómico y a lo que se conoce como “la huida del derecho administrativo”, expresión que resume los métodos que los partidos aplican para controlar las instituciones y tejer una red clientelar, la base de cualquier poder que aspire a perdurar.
Los Cuadernos del Sur en La Vanguardia.
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