El día exacto de su investidura, Juan Manuel Moreno Bonilla (PP), presidente de la Junta de Andalucía por una simpática carambola del destino, comparó el cambio político en el Sur con el espíritu de la Santa Transición: “Nos proponemos algo parecido y, como Adolfo Suárez en aquellos momentos transcendentales, digo ahora que no puedo asegurar soluciones a todos los problemas ni que de la noche a la mañana se satisfagan todas las reivindicaciones, pero sí puedo comprometer y comprometo mi esfuerzo, mi honor y mi fe en Andalucía”. Sin duda, un exceso (retórico) fruto del entusiasmo del momento. Ni Bonilla –ni el asesor que le escribió este sublime parlamento– tienen, como acostumbra a decirse, abuela. Su imagen sobre sí mismos, como evidencian estas palabras que buscan –sin lograrla– la solemnidad, porque sólo son la copia de un original remoto, es excelente. Pero los hechos dicen algo muy distinto.
Los Cuadernos del Sur en La Vanguardia.
Deja una respuesta