• Saltar a la navegación principal
  • Saltar al contenido principal
carlosmarmol.es

carlosmarmol.es

Periodismo Indie

  • Inicio
  • Biografía
  • Periodismo
    • El Correo de Andalucía
    • Diario de Sevilla
    • El Mundo
    • Crónica Global
    • La Vanguardia
  • Literatura
    • Libros
    • Revistas
  • Filología
    • La retórica del prosaísmo
    • Academia
  • Dirección Editorial
    • Letra Global
    • Revista de Occidente
    • Orpheus
    • Geographica
  • Bitácoras
    • Disidencias
    • Cuadernos del Sur
    • Los Aguafuertes
    • Las Tribunas
    • Crónicas Indígenas
    • La Noria
    • Cuadernos Apátridas
  • Contacto
  • Show Search
Hide Search

Letra Global

Jean Daniel, la ‘grandeur’ socialdemócrata

carlosmarmol · 29 febrero, 2020 · Deja un comentario

Jean Daniel Bensaïd (Blida, 1920-París, 2020) construyó su biografía (vital primero; intelectual después) a partir de un oxímoron y gracias a una leyenda. El oxímoron lo componen dos palabras, en apariencia contradictorias: periodismo progresista. Equivalente a su adjetivación opuesta: periodismo conservador. La leyenda, que adquirió bastante pronto la condición de mito, nos habla de un pretérito lejano donde conviven un proverbial mal genio, la devoción fraternal por Albert Camus, su condición de combatiente en la Segunda Guerra Mundial –desembarco en Normandía incluido– y la fundación del Le Nouvel Observateur, un prestigioso semanario de actualidad política –sí, eran otros tiempos– que entonces marcaba la agenda europea y, al menos para la izquierda ilustrada francesa, fue uno de sus particulares evangelios (laicos). La Biblia de cierta forma de entender la grandeur. En realidad, la historia de Daniel, fallecido esta semana con el reconocimiento general propio de un vino centenario, un caldo gran reserva, impecable dentro de sus ternos señoriales, coqueto cada vez que gastaba sombrero, particularmente sensible a los elogios y longevo tras una vida generosa, es mucho más simple: entre la epopeya y la admiración, lo que había es nada más –y nada menos– que un hombre culto e inteligente que, viniendo del África francesa –nació en Argelia en una familia hebrea– estuvo presente en las grandes diatribas políticas de su tiempo y, en cierto sentido, traspasó esa frontera invisible que diferencia a aquellos que miran la Historia (desde fuera) y quienes (desde dentro) la protagonizan.

Las Disidencias en #LetraGlobal.

Javier Cercas, ‘back to basics’

carlosmarmol · 22 febrero, 2020 · Deja un comentario

Los géneros literarios componen una suerte de gramática sobre el género humano. Son una manera de mirarnos a nosotros mismos. Esta condición universal explica que, igual que el propio concepto de cultura, no importe mucho dónde y cuándo se hayan inventado. Lo trascendente es si son eficaces para retratar el alma humana. En un contexto en el que algunos –sobre todo los autores que la industria editorial nos presenta como hallazgos cósmicos que unas páginas después se tornan decepciones– creen que la literatura consiste en denunciar injusticias de género o verter sus nimiedades bajo la socorrida etiqueta de novela, Javier Cercas, que desde Soldados de Salamina goza de la popularidad del verdadero prestigio, opuesta a la que procede únicamente de los índices de ventas, ha tenido el arrojo de dar un cambio a su trayectoria para regresar al sitio de donde venía, que no es otro que la tradición literaria, aunque no entendida desde el punto de vista académico –sus años como profesor universitario quedan ya lejos–, sino estrictamente creativo.

Las Disidencias en #LetraGlobal.

Steiner, vida & milagros

carlosmarmol · 16 febrero, 2020 · Deja un comentario

“Mi padre, que era un hombre reservado y oscuro, me explicó de pequeño algunas cosas que después han marcado mi vida. Me dijo: “Donde quiera que estés, ten siempre preparada una pequeña maleta con tu equipaje; recuerda siempre dónde está la puerta; nunca tengas miedo a volver a empezar otra vez, nunca; hacerlo es un extraordinario privilegio”. Ésta es la ley que rige ahora mi vida: si tengo que marcharme, no importa, sé que mi hogar es mi máquina de escribir. Si me permiten tenerla es como si poseyera un pasaporte: no tengo miedo; si tengo que cambiar de país aprenderé una nueva lengua y esta experiencia que me hará más rico”. En este frase, pronunciada por George Steiner (1929-2020), se condensa la extraordinaria capacidad que tiene la cultura –ese magma que nos explica– para guiar nuestra existencia, especialmente cuando se carece –por supuesto, no era su caso– de conocimientos académicos.

Las Disidencias en #LetraGlobal.

Boecio y la Rueda de la Fortuna

carlosmarmol · 8 febrero, 2020 · Deja un comentario

Las guerras más devastadoras que existen son aquellas en las que los dos adversarios en liza coinciden en una única persona: uno mismo. Si la leyenda cuenta que Cervantes concibió El Quijote –ese “hijo seco, avellanado, antojadizo y lleno de pensamientos nunca imaginados de otro alguno”- en la cárcel de la Sevilla del Siglo de Oro, “donde toda incomodidad tiene su asiento y donde todo triste ruido hace su habitación”, el tratado filosófico más influyente del extraño quicio histórico que separa la Edad Media del Renacimiento se concibió en una celda del Ager Calventienus de la ciudad italiana Pavía, a la espera de un juicio que terminó con una decapitación sangrienta, confirmando así la máxima de que cuando los seres humanos somos felices, vivimos; y cuando nos sentimos desgraciados, filosofamos. El fruto de aquel sufrimiento, olvidado en las densas arenas del tiempo –hablamos del año 523 después de Cristo–, es una obra absolutamente maravillosa compuesta por un cónsul romano caído en desgracia –Boecio– que trata sobre la naturaleza y los caprichos de la diosa Fortuna, esa mujer caprichosa. La editorial Acantilado, en uno de esos gestos que ennoblecen a quien se dedica al maravilloso arte de hacer libros, la recupera ahora íntegra con traducción del latín al cuidado de Eduardo Gil Bera en su colección Cuadernos. No es ni mucho menos un libro desconocido para quienes se hayan preocupado de cultivarse a sí mismos mediante el arte de la lectura, pero si supondrá (para otros) un gozoso descubrimiento. Básicamente porque las preguntas que se hace Boecio son las nuestras: ¿Por qué diablos la felicidad es pasajera? ¿Cómo se explica que medren los mediocres? ¿Cuál es la razón de la existencia? ¿Existe Dios? ¿Somos libres o estamos atados, como los esclavos, al yugo de un arado? ¿Cuál es el origen del mal?

Las Disidencias en #LetraGlobal.

¡Vivan los años setenta!

carlosmarmol · 1 febrero, 2020 · Deja un comentario

Todo lo que sube, desciende. El idealismo, en cualquiera de sus variantes, conduce antes o después al prosaísmo. El principio mecánico que alimenta esta ley es indudablemente físico, pero también de índole cultural. Quizás por eso a los años sesenta del pasado siglo XX, ese extraordinario tiempo (pasajero) en el que parecía que los sueños podían transformar el mundo, cuando sucedía la gran revolución de la cultura popular en Occidente, triunfaba la lucha por los derechos civiles y se extendían por todas las clases sociales, igual que un fluido ambiental, las hermosas reivindicaciones hippies, que ofrecían un falso paraíso sin agua corriente lleno de paz, drogas y sexo (con flores en el pelo), dieron paso, en la década posterior –los caóticos setenta– a un universo marcado por el deterioro social y económico, el desengaño y la irrupción dentro del cuadro colorista previo de la vulgaridad como destino.

Las Disidencias en #LetraGlobal.

  • « Ir a la página anterior
  • Ir a la página 1
  • Páginas intermedias omitidas …
  • Ir a la página 52
  • Ir a la página 53
  • Ir a la página 54
  • Ir a la página 55
  • Ir a la página 56
  • Páginas intermedias omitidas …
  • Ir a la página 80
  • Ir a la página siguiente »

carlosmarmol.es

Copyright © 2025

Linkedin | Medium | Academia | Twitter

Soundcloud | Pinterest | Youtube

Ilustraciones: Daniel Rosell