Los historiadores cuentan que cuando Franco ganó la Guerra Civil a sangre y fuego, como dejó establecido para siempre Manuel Chaves Nogales, entre 5.000 y 8.000 personas cruzaron desesperadas la verja de Gibraltar -construida por los británicos en 1909- huyendo del régimen militar que, con la pertinaz ayuda de la iglesia, convertiría España durante cuarenta años en un inmenso cuartel. Entre esos exiliados, más bien repentinos, caminaba con 17 años cumplidos una niña republicana de Los Barrios (Cádiz) cuyo nieto terminaría presidiendo el gobierno colonial de la Roca. Ese hombre es Fabian Raymond Picardo (Gibraltar, 1972), el abogado que lidera del Partido Laborista en la Liliput del Estrecho y que, como premier, ha negociado con el Gobierno español un singular sistema para que el istmo permanezca dentro del acuerdo de libre circulación europea (Schengen) en una operación que supone sustituir un largo litigio de soberanías por el pragmatismo de los intereses.
El Bestiarium en El Mundo.
Deja una respuesta