Lo de los españoles -esos seres mitológicos- con España es un asunto imposible. Negado y reiterado, sostenido y cuestionado. La identidad española, igual que el tiempo en San Agustín, es algo que casi todos sabemos en qué consiste pero que nadie sabe muy bien cómo definir. Al menos, sin ganarse automáticamente un enemigo inmediato; generalmente, otro español que, por supuesto, no se considerará tal. Sobre esta compleja materia conversaron este lunes en ‘Letras en Sevilla’, el ciclo de conferencias que Arturo Pérez Reverte y Jesús Vigorraorganizan en la Fundación Cajasol, el sociólogo Antonio Escohotado, probablemente el mayor pensador español desde la Transición, y la filóloga María Elvira Roca, profesora de Clásicas y autora de ‘Imperiofobia’, un ‘best-seller’ que desmonta -con argumentos- el famoso mito de la leyenda negra. Lo hicieron ante la atenta mirada de Alfonso Guerra, que apenas minutos antes había inaugurado la reunión con una larga, machadiana y previsible ponencia en la que hizo una extensa disertación por la historia para concluir -cosa obligada- que España es algo que sí existe -digan lo que digan los nacionalistas- y que la Transición, en la que su persona tuvo tanto interés como indiscutible protagonismo, sigue siendo un ejemplo para el mundo.
Una crónica para El Mundo.